Cómo financiar una franquicia
De interés para prácticamente todos los posibles franquiciados es cómo van a obtener el financiamiento necesario para financiar sus aspiraciones de franquicia. Sin embargo, desde la recesión de 2008, ha habido un cambio en donde los futuros franquiciados están recibiendo su dinero de inversión. Hace años, la mayoría de las franquicias se financiaban principalmente a través de préstamos bancarios (crédito) y siguen siendo populares. Pero hoy en día, los ahorros personales llevan a los futuros franquiciados potenciales opciones de financiamiento.
Inmediatamente después de la recesión y de la fase de recuperación resultante, el financiamiento bancario tradicional se volvió tan difícil de obtener que los posibles franquiciados afortunados de tener algún tipo de nido de huevos se volvieron hacia sus propios recursos para financiar sus franquicias. Muchos hicieron esto usando sus cuentas de jubilación en una configuración conocida como ROBS, o Rollovers for Business Startups.
ROBS ha estado presente durante décadas, pero cuando el mercado se desplomó, la gente se dio cuenta de que “quizás me gustaría invertir en mí mismo y controlar mi destino”, dice Rocco Fiorentino, director ejecutivo de Benetrends. En 2008, 2009 y 2010, cuando el acceso al crédito era muy difícil, las renovaciones fueron muy populares y, francamente, la mayoría de los franquiciadores recomendaban que como una forma de financiar los negocios.
Pero, mientras que los futuros franquiciados han encontrado el beneficio de usar sus fondos de jubilación para financiar franquicias en los años desde la recesión, no es un problema. Muchos posibles franquiciados están interesados en diversificar la forma en que financian una franquicia.